Cobalt: saying ‘no’ to child labour

Si usted tiene un dispositivo móvil, es muy probable que funcione con una batería que contiene cobalto. A medida que avanzamos en la transición hacia una economía baja en carbono, se prevé que la demanda de baterías crezca conforme lo hace el número de aplicaciones donde se utilizan, desde el almacenamiento energético a gran escala hasta los vehículos eléctricos. Según statista.com, en 2025 se anticipa que la demanda mundial de cobalto para baterías ascienda a 117.000 toneladas anuales, casi un 210% más con respecto a 2017. Aunque esto podría cambiar en el futuro, a día de hoy el cobalto es un ingrediente clave de la economía moderna. No obstante, hay muchos riesgos asociados a su suministro.

Por azar geográfico, la mayoría de las reservas de cobalto del mundo se encuentran en la República Democrática del Congo (RDC). Este país atraviesa desde mediados de la década de los 90 una situación de continua violencia y conflicto poco tendente al respeto de los derechos humanos. No es raro encontrar niños trabajando en las proximidades o en las propias minas de cobalto, incluso extrayendo el mineral a mano (lo que se conoce como minería artesanal). A los niños se les niega una educación, y su salud es puesta en riesgo por la exposición a polvo y a altos niveles de cobalto en su torrente sanguíneo, algo que, en determinadas concentraciones, puede resultar nocivo para la salud.

Dado el importante papel que desempeña la innovación tecnológica para conseguir los objetivos medioambientales y sociales de sostenibilidad, muchas de las empresas en las que invertimos tienen, directa o indirectamente, exposición al cobalto en sus cadenas de suministro. En consecuencia, hemos identificado el cobalto como un riesgo clave para nuestra estrategia, y un área de interacción.

Nuestro enfoque, consecuente con las recomendaciones de los Principios para la Inversión Responsable (PIR) de la ONU, consiste en abordar el riesgo interactuando con las empresas que tienen cobalto en sus cadenas de suministro. Como base de dicha interacción utilizamos la Guía de diligencia debida de la OCDE para la gestión responsable de las cadenas de suministro de minerales procedentes de zonas de conflicto y de alto riesgo. Este documento detalla un marco en cinco pasos que deben seguirse para asegurar la diligencia debida dentro de una cadena de suministro de minerales.

1. Establecer unos sólidos sistemas de gestión a nivel corporativo
2. Identificar y evaluar el riesgo en la cadena de suministro
3. Diseñar e implementar una estrategia para responder a los riesgos identificados
4. Realizar una auditoría exerna independiente sobre la diligencia debida en puntos identificados dentro de la cadena de suministro
5. Comunicar el resultado de la diligencia debida de la cadena de suministro

También consultamos a una trabajadora de una organización benéfica de la RDC para obtener información sobre los retos que entraña la implementación de los cinco pasos. La calidad de la auditoría fue puesta en duda, en particular, por el hecho de que los niños fueran retirados de las instalaciones mineras cuando los auditores se aproximaban. Su principal punto de preocupación, no obstante, fue la falta de una alternativa para los niños que trabajaban en las minas. Aunque es ilegal que los niños menores de 18 años trabajen en las minas, la ley no se cumple por diversos motivos de orden económico y social. Su recomendación fue que las empresas se asociaran con organizaciones benéficas que procuran servicios de guardería y escolarización, y que aportaran los medios para que las familias envíen allí a sus hijos sin sufrir consecuencias económicas.

Microsoft’s productivity and business software and carbon neutral cloud platform are used in many different ways for the benefit of the environment and society. The power of computing underpins all technological innovation and Microsoft’s mission is to empower every person and every organisation on the planet to achieve more. With its partners, Microsoft has developed solutions spanning education, healthcare, water, buildings, infrastructure, and transportation, to provide essential services to society and help modernise cities in sustainable ways that minimise negative environmental impacts.

Microsoft es una posición a largo plazo en la estrategia ISR y, como una de las mayores empresas tecnológicas, tiene una influencia material en la demanda de cobalto. Cuando empezamos a interactuar por primera vez con Microsoft sobre este tema, la empresa no disponía de información que vinculara el cobalto utilizado en su cadena de suministro y las minas de las que se extraía. Por tanto, fuimos incapaces de implementar el marco de cinco pasos para el cobalto.

Hacia finales de 2018, nos reunimos con el director senior de Compras Responsables y Certificaciones de Microsoft, y tratamos los cambios que la empresa había introducido en su cadena de suministro y la publicación por Microsoft de un nuevo informe, Sostenibilidad en Dispositivos, para 2018. Nos complació ver que Microsoft había hecho un esfuerzo por aumentar la transparencia del cobalto dentro de su cadena de suministro mejorando la trazabilidad y la diligencia debida de la misma en consonancia con la guía de la OCDE.

Además, Microsoft apoya Pact, una ONG que ayuda a las empresas a luchar contra el trabajo infantil en las cadenas de suministro de minerales. Con el apoyo financiero aportado a las familias y los servicios educativos, se consiguió una reducción de entre el 77%y el 97% en el número de niños que trabajan en las minas en las regiones congoleñas de Manono y Kolwezi. Este programa recibió el reconocimiento internacional. Microsoft continúa trabajando en lo que respecta al cobalto, y seguiremos interactuando con la empresa acerca de sus progresos.

De forma importante, la actuación de Microsoft también tiene perfecta lógica en términos empresariales. Al responsabilizarse de mejorar los estándares en los eslabones inferiores de su cadena de suministro, está reduciendo el riesgo de disrupciones del suministro y de daño para su marca. La empresa también está dando pasos adelantándose a la regulación. Aunque todavía no existe una regulación vinculante en torno al cobalto, dados los acontecimientos regulatorios alrededor de los minerales conflictivos, es probable que los responsables políticos, en particular los de la Unión Europea, pronto aborden esta carencia regulatoria.

Desde una perspectiva de inversión, creemos que las empresas que reconozcan un deber fiduciario amplio hacia todos sus grupos de interés serán las que generen mejores resultados a largo plazo.